El maná del social media para abogados



Proliferan en la red artículos, post, tuits,... sobre la importancia del socia media para abogados. Tal es así que el ICAM ha hecho pública una guía de buenas prácticas de los abogados que hacen uso de herramientas y/o redes sociales (la podéis encontrar aquí).

No voy a negar la importancia de nuestra presencia en las redes sociales, pero si creo necesario poner cierto coto a los efectos que se anudan a esa presencia que, en no pocas ocasiones, se califica de imprescindible. 

Lo que voy a decir a continuación es desde mi experiencia, pues no soy, ni mucho menos, experto en la materia, por lo que el post se abre a vuestra crítica.

La presencia en las redes sociales es importante desde una perspectiva del conocimiento y de relación con otros profesionales, pero dista mucho de convertirse en la panacea de la captación de clientes. 

¿Porque pienso así? Pues porque nuestra profesión tiene un pilar básico, la confianza del cliente, y la misma no se insufla ni por twitter, ni por facebook, ni por linkedIn. La confianza se gana y, para ello, es del todo punto necesario tratar, en persona, y no en el mundo virtual, con el cliente.

Y es que una cosa es complementar nuestra actividad con las redes sociales y otra bien distinta es pensar que las redes sociales son un buen medio para la captación de nuevos clientes.

Fijémonos, por ejemplo, en nuestros contactos de linkedin o en nuestros followers de twitter. ¿Que perfil tienen? Pues seguramente el nuestro y, por ello, la virtualidad de conseguir un cliente a través de nuestra presencia en twitter o en linkedin es nula o, prácticamente nula. Si os sirvo como ejemplo, yo hasta la fecha no he conseguido ninguno.

Hay que olvidarse del mundo 2.0 y poner los pies en el mundo real pues el cliente quiere vernos, oírnos, contarnos,... y, para eso, no vale el social media. La tecnología nos permite llevar asuntos  en cualquier punto geográfico y a pesar de ello ¿cuantos clientes tenemos de fuera de nuestra área geográfica?. ¿Porqué? pues simple y llanamente porque el cliente quiere nuestra cercanía, y ello no se sustituye ni con social media ni con videoconferencias. La confianza se gana en el cara a cara, con la tranquilidad  

Luis Abeledo (@luisabeledo), un amigo virtual, también abogado, me dijo ayer que "existe vida fuera de Twitter y que no ha conseguido un solo cliente en redes sociales". Aprovechemos el conocimiento y la relación con otros profesionales, que es muy enriquecedor, pero no caigamos en el error de abandonar el mundo real que en definitiva es el que nos da de comer. 

Otro compañero tiene una expresión muy gráfica, "no sabes las langostas que me he tenido que comer para llevar los garbanzos a casa". 

Buen provecho!!






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